Poema

Dios escribe un verso que rima con esto: el asalto a la ciencia por parte de la élite  y su apropiación como instrumento de poder con el que someter a la sociedad creando una población cuya marginalidad se diluye en la creencia inoculada de heredar el pecado original.

La idea del ejercicio del poder se representa desde la base de haber sufrido su abuso, es la cadena de transmisión. Todos necesitamos sentirnos seguros en un sistema que nos ofrezca alternativas que poder elegir, en eso reside el ideal de libertad. 

La existencia requiere de tomar la vida para su posterior entrega y los actos que por necesidad despliega esta entidad transitiva desarrollan la relación política en la que ahora, el significado de Estado se encuentra en proceso de migración hacia un continente cuyos límites y bases están en pleno proceso de vacunación. 

A su manera trataba de reproducir el poder de la naturaleza recreando el orden por medio de rutinas que a modo de talismán le conjuraban contra el caos.  

De mayor uno vive exiliado del niño que fue bajo la falsa apariencia de libertad. Nunca se es tan libre como cuando no era necesario elegir; desde entonces somos esclavos del pasado, nos condiciona en un prejuicio redundante. En realidad, llega un momento en que al final del día nos cuesta reconocer la persona que fuimos, cómo los intereses que en la niñez poblaban todo el universo en el que discurría nuestro albedrío habían sido sustituidos por restos de la tormenta que dejó la transición hacia seres adultos e independientes, el atrezo impostado que constituye la biografía, costaleros del pasado en procesión que avanza al origen; de muy mayores solo se recuerda el pasado remoto porque es lo único que de verdad existe. 

Es imposible volver atrás, el pasado se reencarna en el presente gestando el futuro; siempre es así, todo cambia para seguir igual.