Pi

 Tener hijos y asistir al vacío de su emancipación es como tener un mejor amigo exalcoholico, al que te unen infinidad de experiencias compartidas, que además es vecino tuyo y no puedes evitar percibir signos que de manera indudable te dicen que va a recaer y no sabes cómo afrontar la situación; por mucho que le digas que le quieres, que estás ahí para ayudarle, que no le vas a dejar solo, sabes que tiene que pasar él por ello, que lo que tenga que suceder, el sentido que adopte el curso de su vida dependerá de cómo afronte esa infinita soledad en la que vagará perdido en la inmensidad de los segundos, en el insondable presente del sobrio que desea desconectar del terror de ser él y nada más que él, y que todo eso no depende de eso que llaman la fuerza de voluntad, consiste en la mayoría de las veces en pura suerte, en el azar del canto de una moneda al caer. 

Siento un gran dolor, solo la muerte puede aliviarlo, pero no puedo quitarme de en medio, no voy a hacerlo por ellos, pero tampoco voy a decírselo nunca; ese es mi trato con la vida. 

Un maestro es quien elige lo que existe, transmite. La vida, la maestra, esa masa de repostería que se extiende y dobla sobre sí misma una y otra vez. 

La receta; somos los cocineros y los comensales pero sin derecho a elegir, ni el entrante ni el postre. 

Sentía la soledad de un náufrago que se hunde en la narrativa de una sociedad de individualidades, en una gran feria de coches de choque. 

Por eso emigró a un país en el que no entendiese su lengua. Enfrentarse a la existencia desprovisto de la palabra establecía una relación con el entorno de carácter primario, cada acción a emprender implicaba una reflexión preparatoria, una estrategia ajedrecista de anticipación que le acercaba al movimiento instintivo y primario de los animales a los que atribuimos un nivel intelectual en el umbral de consciencia previo a la instrumentalización como fin es sí mismo, como vehículo permanente en el que instalar un progreso que evoluciona en trayectoria circular cuyo destino alcanzará el punto de partida como una máquina del tiempo que paradójicamente muestra que el futuro es volver atrás; mañana solo recordarás.

Según esta visión, tuvo la revelación de que debería existir una relación exacta entre la vida y el número irracional pi, la razón entre la longitud de cualquier circunferencia y la de su diámetro, el sentido que se esconde en el tiempo en que transcurre una vida: su diámetro, la recta que une los dos puntos de la circunferencia de la existencia, la línea directa entre el nacimiento y la muerte. 

Ese sentido es la solución al enigma matemático de la cuadratura del círculo que se expresa desde la reformulación de una pregunta mal formulada; no es posible la cuadratura porque la respuesta real es mucho más compleja, del movimiento circular en que discurre la existencia, la unión de los puntos diametralmente opuestos genera el canibal renacimiento de una nueva vida, cada uno de los decimales de pi, sucesivos, infinitos e irrepetibles.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Nobel

Egótico.

Tomad y comed todos de él.