Flores salvajes.
Su descubrimiento largamente trabajado consistía en sobreponerse a la mayoría de sus creencias que en realidad se sintetizaban en su ego, su personalidad, para así, sobreponerse a sí mismo, consciente de su intrascendencia y asistir a la verdadera naturaleza de su existencia, la de un azucarillo que se va disolviendo a medida que el líquido va provocando la reacción natural que corresponde al entrar en contacto; me consuelo con ser uno de los ingredientes que dieron una pizca de dulzor a la receta. Tener otro hijo para que el primero también tenga familia en el futuro; valorar la soledad y entregar un acto de amor largo y paciente. Madre, nos has entregado años de ti. Libres, como flores salvajes que se abren al sol de la mañana. Los primeros rayos de luz que sobrepasan la sombra que sigue el mecer de las hojas del árbol. El fresco que advierte al cuerpo a despertar. La piel siempre avisando de lo que no eres tú. El tacto del frío y del calor. Eres la frontera en que se expr...